Alevín B 7 – 2 Mislata B
El Alevín B recupera sensaciones con una gran victoria en casa
Nueva jornada para nuestro Alevín B, que afrontaba doble compromiso en casa con la intención de reencontrarse con la victoria tras dos partidos complicados. En esta ocasión, recibíamos al Mislata B, en un día especial en el que el equipo estrenaba su nueva equipación, símbolo de ilusión y de un nuevo comienzo. Y efectivamente, trajo suerte.
Desde el pitido inicial se vio a un equipo concentrado, con las ideas claras y con ganas de mandar en el partido. Muy pronto llegaría el 1-0, fruto de una excelente combinación colectiva que culminó con el primer tanto de la mañana. Los nuestros continuaron dominando el juego, moviendo el balón con criterio y generando ocasiones claras. En una de ellas, un potente disparo lejano con una parábola perfecta sorprendió al portero rival para poner el 2-0 en el marcador.
El equipo se encontraba cómodo, confiado y con ritmo. Poco antes del descanso, un balón largo de nuestro portero permitió a nuestro delantero plantarse solo ante el guardameta y anotar el 3-0, con el que nos marchábamos al descanso tras una primera parte muy completa.
En la segunda mitad, el partido se abrió más. Con ambos equipos volcados en ataque, las transiciones se sucedían y el encuentro ganaba en intensidad. El Mislata B recortó distancias tras una rápida contra que nacía de un córner a favor, poniendo el 3-1, pero la reacción del Hispanic Fuensanta fue inmediata: el equipo se recompuso, siguió tocando y en dos grandes jugadas colectivas aumentó la ventaja hasta el 5-1.
Las ocasiones continuaron llegando, y aunque el marcador pudo ser aún más amplio, la efectividad volvió a aparecer tras una acción con varios rechaces que terminó con el balón dentro de la portería rival: 6-1. El conjunto visitante volvió a anotar tras una pérdida en campo propio, situando el 6-2, pero los nuestros no bajaron los brazos y, con otra jugada trenzada de muchos toques, cerraron el partido con el 7-2 definitivo.
Un encuentro muy completo de todo el equipo, que supo combinar intensidad, trabajo y alegría en el juego. Tres puntos muy merecidos que refuerzan la confianza del grupo y demuestran el gran progreso que se está viendo semana a semana.
Enorme trabajo de los jugadores y, como siempre, un aplauso especial para nuestra afición, que anima sin descanso en cada jornada y hace que el Anabel Medina sea un fortín.
